El Recuento 2017 visualiza 1.026 personas durmiendo en la calle y 1.954 alojadas en equipamientos

Un total de 998 personas voluntarias han participado entre las 21.30 y las 2.00 horas en el Recuento 2017 organizado por las 34 entidades que integran la Red de Atención a Personas Sin Hogar (XAPSLL por sus siglas en catalán), incluido el Ayuntamiento de Barcelona. La actividad se ha desarrollado gracias al trabajo de los 287 grupos que se han dividido por toda la ciudad a partir de los 13 puntos de encuentro que se habían fijado previamente, y ha contado con la participación activa de varias personas voluntarias que han vivido en la calle. Es la quinta vez que se hace una actividad de este tipo, con los objetivos de sensibilizar a la ciudadanía sobre la problemática del sinhogarismo, dar a conocer la labor de las entidades de la XAPSLL, contabilizar el alcance del fenómeno en una noche concreta y detectar nuevos espacios de pernocta en la ciudad.

En total se han contabilizado 1.026 personas durmiendo en la vía pública, 1.954 en equipamientos municipales o de las diversas entidades sociales y 415 en asentamientos irregulares. Las personas que se contabilizaron durante el recuento del año pasado fueron 941 durmiendo en la calle, 1.907 en recursos residenciales de la XAPSLL y 383 en asentamientos.

Según los datos recogidos de forma provisional, la distribución ha sido la siguiente:

–        Ciutat Vella:                     271 personas

–        Eixample:                         210 personas

–        Sants – Montjuïc:              188 personas

–        Les Corts:                        39 personas

–        Sarrià – Sant Gervasi:       59 personas

–        Gràcia:                            29 personas

–        Horta – Guinardó:             45 personas

–        Nou Barris:                       43 personas

–        Sant Andreu:                    11 personas

–        Sant Martí:                       131 personas

–        TOTAL:                            1.026 personas

 

Explicación multicausal


En la rueda de prensa para explicar los datos, las entidades sociales y el Ayuntamiento de Barcelona han coincidido en agradecer el esfuerzo de todos los voluntarios. El portavoz de la XAPSLL, Ricard Barull, constató la “importante labor de sensibilización” hecha durante el recuento y el mérito del millar de personas voluntarias que “han dedicado su tiempo a las personas sin hogar”. “La mejor noticia habría sido no encontrar a nadie en la calle”, ha añadido la otra portavoz de la XAPSLL, Maite Mauricio, aunque desgraciadamente la situación es otra y se confirma la tendencia al alza de este fenómeno. Mauricio lamentó las “claras dificultades que encuentran las entidades para acceder a precios de alquiler accesibles”, aunque ha puesto en valor que durante los dos últimos años el número de personas alojadas en recursos residenciales ha aumentado un 17%.

La teniente de alcalde de Derechos Sociales del Ayuntamiento, Laia Ortiz, ha corroborado las dificultades que encuentra la XAPSLL para reducir el número de personas sin hogar en un contexto en el que no está garantizado el derecho a la vivienda y se incrementa el riesgo de exclusión residencial: “A pesar de un esfuerzo inversor récord necesitamos más alianzas y un gran consenso en materia de vivienda que va más allá de Barcelona”. Además, ha evidenciado que aunque se trata de un problema de país, Barcelona es de las pocas ciudades que tiene servicios específicos de atención a personas sin hogar y eso hace que la tarea que desarrolla la XAPSLL sea “una poco en solitario “y sin la participación de otras administraciones, a pesar de que precisamente es Barcelona la ciudad con más dificultades para acceder a una vivienda. “Es necesario que todas las administraciones se comprometan contra la exclusión residencial y a favor de garantizar el derecho a la vivienda”, agregó Ortiz.

El fenómeno del sinhogarismo tiene una explicación multicausal, aunque hay tres factores claros y que guardan algún tipo de relación con esta creciente exclusión residencial: el aumento del precio del alquiler, la inexistencia de un parque público de vivienda suficiente para dar respuesta a las necesidades sociales y la precarización del mercado laboral. La realidad es que cada vez es más difícil que las personas atendidas accedan a una vivienda de alquiler o a una habitación, a pesar de obtener ingresos, mientras crece el número de personas sin hogar que tienen trabajo. El Ayuntamiento de Barcelona ha pedido reiteradamente una ley que permita fijar topes al alquiler, el aumento del salario mínimo y la derogación de la última reforma laboral. Aparte de esto, junto con las entidades, ha diseñado un nuevo plan de trabajo que vincula las políticas sociales con las políticas de vivienda, y se ha elaborado el Plan de lucha contra el sinhogarismo en Barcelona desde 2016 hasta 2020. El plan prevé una inversión superior a los 5 millones de euros hasta 2020 en equipamientos y un incremento de 10 millones de euros anuales en la atención, pasando de 26,85 a 37,42 millones de euros.

A niveles de equipamientos, esta inversión se concreta en la entrada en funcionamiento en noviembre pasado de las 48 plazas de alojamiento individuales en la calle Sant Pere Més Baix, o más recientemente de las 41 plazas pioneras para atender a personas sin hogar con problemas de salud mental en Cal Muns. Además, el próximo septiembre está prevista la puesta en marcha de un centro residencial de 20 plazas para chicos y chicas sin hogar y este año también se acabará la construcción de dos equipamientos en la calle Tánger y de Alí Bei. Igualmente hay diseñada la reforma integral de los Centros de Primera Acogida de Zona Franca y de Sarrià, lo que, además de redistribuir los espacios para que los usuarios y usuarias ganen intimidad y comodidad permitirá sumar 20 nuevas plazas.

El trabajo de la XAPSLL, además, se ha concretado en la elaboración de una guía con recomendaciones sobre el abordaje del sinhogarismo pensada para medios de comunicación y representantes políticos bajo el lema ‘Podrías ser tú’, y que ha estado disponible por primera vez en este recuento. Este año también está previsto elaborar un nuevo informe de diagnóstico sobre este fenómeno en la ciudad de Barcelona.